El impacto de las redes sociales debería acompañar la estrategia de marca, al igual que cada esfuerzo de comercialización. Todos sabemos que las recomendaciones boca a boca pueden servir para beneficiar o ir en detrimento de una marca. De la misma manera actúan las redes sociales.
A pesar de su valor, muchos especialistas en marketing ,todavía sienten que hay muchos desafíos asociados a estas redes sociales.
Quizás el mayor desafío es que muchas grandes compañías no se sienten cómodas con ellas ya que es difícil controlar que se dice de la marca.La mayoría de estas grandes compañías están acostumbradas a medir el retorno de cada dólar invertido en publicidad y promociones, y a decir verdad, no existen (hasta ahora) métricas exactas que permitan exhaustivamente controlar los esfuerzos efectuados en las redes sociales.
La presencia de las marcas en las redes sociales las “humaniza”, y en consecuencia, es vital que cada miembro de la organización participe.
La gente está hablando de su marca por todas partes en la Web. Si usted no tiene visibilidad sobre esas conversaciones, y no se prepara para asistir a los clientes cuando corresponda, entonces no tendrá control sobre la percepción de su marca.
Si usted puede entablar una conversación, añadir valor a una conversación existente, ayudar a alguien en la necesidad o simplemente entender de qué está hablando la gente y porqué, su organización habrá dado un gran paso. El solo gesto de participar ya es positivo.
Las compañías que adhieran a los principios de transparencia, objetividad y autenticidad, podrán desarrollar confianza en sus clientes.
Después de todo, de esto se trata la Web 2.0: un escenario para escuchar las necesidades, preocupaciones e insatisfacciones de los clientes a escala global.
La clave esta en comprender como las redes sociales pueden complementar sus actuales métodos y actividades de marketing y comercialización.